Cuando por las venas de la América Latina corra, cariñosa y despierta identica sangre. Cuando los ríos desemboquen en un mismo mar. Cuando los nombres ya no sirvan de frontera. Cuando la palabra sustituya a las monedas...
...sabremos, al fin, que no estamos cansados de sonar la Libertad.
Titicaca, una mar de agua dulce 3800 metros todavía mas cerca a las estrellas.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario